Construir una cultura de feedback fomenta la comunicación honesta y abierta entre los trabajadores y para con la empresa. Convertir el feedback en un hábito permite a la empresa conocer a fondo las necesidades, preocupaciones e intereses de sus personas. En consecuencia, te ayudará a saber cómo trabajar en conseguir la mejor experiencia de empleado posible.
Además, recibir y dar feedback en el trabajo es fundamental para impulsar el desempeño de los empleados y obtener unos mejores resultados. Los mensajes de retroalimentación, tanto positivos, negativos y constructivos, hacen que los procesos de trabajo fluyan con mayor facilidad consiguiendo una mejor armonía y unión de equipo, lo que deriva a un mejor ambiente laboral.
Pero si este es el caso, ¿por qué muchas personas se abstienen de dar feedback? Cuando alguien no está familiarizado con este tipo de cultura puede sentirse incómodo al compartir feedback. Normalmente es más sencillo no decir nada, y así “evitar conflictos”. ¿Cuál es el problema de esto? Que se dejan pasar oportunidades de mejora, tanto para los empleados como para la empresa. No solo eso, al no promover que TODOS en tu empresa reciban y den feedback, estás privando a la organización de muchos otros beneficios.
A qué nos referimos por una cultura de feedback y cuáles son sus beneficios
Una cultura de feedback es aquella en la que dar feedback positivo o negativo es parte de la rutina de la propia empresa.
Imagínate esta situación:
- Empresa A: se esfuerzan por construir una cultura de feedback.
- Empresa B: no fomentan el feedback por pensar que podría crear tensiones y afectar a su ambiente laboral.
¿En qué derivaría?
- Empresa A: se genera una conversación entre dos compañeros de trabajo acerca de un proyecto que están desarrollando, conversación que termina en dar feedback constructivo de gran valor. ¿Cuál es el resultado? Identifican áreas de mejoras y logran prever posibles problemas con antelación, obteniendo un mejor resultado final.
- Empresa B: se da la misma conversación, pero cada empleado no expresa abiertamente lo que piensa. Al final, pierden la oportunidad de mejorar y obtener un mejor resultado en el proyecto, lo que deriva en una mayor tensión en el equipo.
Lo que queremos probar es: no fomentar el feedback es un error. Con miras de evitar un momento incómodo, terminas perdiendo todos los beneficios que una cultura de feedback trae. Aquí te contamos algunos:
Mejora los resultados de la compañía
Cuando construyes una cultura donde fomentas el recibir y dar feedback de forma adecuada, terminas alcanzando una dinámica constructiva en tu empresa. Cuando alientas a tu equipo a dar feedback positivo o constructivo, estas pidiendo que den a sus compañeros un consejo para hacer algo mejor o un reconocimiento para felicitarlos por su buen trabajo. Esto ayuda a que la otra persona identifique puntos ciegos, áreas de mejora o incluso hace que se de cuenta de sus fortalezas y ¡busque desarrollarlas aún más!
Como resultado, el dar feedback hace que el desempeño laboral aumente, llevándote a construir un equipo de alto rendimiento.
Mejora la comunicación en la empresa
No importa que tu empresa esté formada por 5 o por 500 personas, una comunicación clara y efectiva es fundamental. Fomentar una cultura de feedback es la forma de lograrlo. De esta forma, conseguirás crear un entorno de confianza para tu equipo. Nadie tendrá miedo a hablar para dar su punto de vista o expresar alguna disconformidad.
Aumenta el sentido de pertenencia y la satisfacción laboral
Cuando das voz a los empleados a través de un espacio para que compartan feedback positivo o negativo, haces que se sientan más cercanos a la organización. Su sentido de pertenencia hacia la empresa aumentará. Al crear una cultura de feedback transmites a tu equipo que valoras su opinión y quieres hacerlos parte del desarrollo de la empresa.
Fomenta el desarrollo profesional
Recibir feedback ayuda al desarrollo profesional y personal de los empleados. El feedback positivo los ayuda a conocer mejor sus fortalezas. Mientras que el feedback constructivo los ayuda a identificar sus debilidades. Al final se convierte en un bucle que los lleva a la mejora continua.
Reduce el índice de rotación
Finalmente, una cultura de feedback puede ayudar a disminuir el índice de rotación. Los empleados que comparten feedback con sus compañeros tienden a estar más satisfechos con sus trabajos y más comprometidos con la empresa. Además, el dar feedback puede ayudar a identificar problemas y/o situaciones tóxicas en tu equipo. Acabar con estos inconvenientes a tiempo también ayuda a que tus empleados se quieran quedar a largo plazo.
Cómo construir una cultura de feedback
Te habrás dado cuenta de todos los beneficios que puede traer una cultura de feedback. ¡Por eso llegó la hora de hablar de cómo construirla!
Para construir una cultura de feedback primero debemos analizar el contexto presente de la compañía. En el caso de que tu empresa tenga una cultura ya establecida que no fomenta el feedback, debes comenzar a incluirlo estratégica y paulatinamente. Por el contrario, si apenas estás comenzando a sentar las bases de tu cultura, este es el mejor momento para incluirlo como parte de los procesos regulares.
En cualquier caso, puedes seguir estas estrategias para construir una cultura de feedback:
Haz que dar feedback sea parte de la rutina de tu equipo
El feedback debería ser el pan de cada día. Sin embargo, es más fácil decirlo que hacerlo. Para lograr que el dar feedback sea parte de la rutina diaria necesitas convertirlo en un proceso regular dentro de la empresa. Deben ser procesos fáciles para todos, porque de otra manera no funcionará.
Un software de employee engagement como Nailted te ayudará a convertir el feedback en un hábito en tu empresa:
- Permitirte crear bucles semanales de reconocimiento laboral entre compañeros. Todos pueden felicitar el buen trabajo de los demás enviando “aplausos digitales”. Es una forma de gamificar el reconocimiento laboral, creando bucles divertidos de feedback positivo entre empleados.
- Ofrecerte la opción de crear encuestas de pulso anónimas, que permite a cada empleado dar feedback sobre la empresa abiertamente y sin temor a consecuencias negativas.
- Facilitarte el programar reuniones 1:1, check-ins y evaluaciones del desempeño. Esto ayuda a los managers a hacerlas y fomenta que los empleados quieran tenerlas. Así también puedes promover el desarrollo profesional en tu equipo.
- ¡Y podríamos seguir!
La clave para crear una cultura de feedback es integrarlo de forma estratégica en diferentes procesos de tu organización. Una herramienta de employee engagement te permitirá analizar el feedback recogido y te ayudará a diseñar estrategias que lleven a mejorar la experiencia del empleado.
Construye un entorno de confianza de arriba a abajo
Es muy difícil que los empleados se atrevan a dar feedback en un ambiente laboral en el que no se sientan seguros. Tu equipo debe sentir que ser honestos o auténticos no va a perjudicar su trabajo. Así mismo, también deben sentirse cómodos al recibir feedback, entendiéndolo como una dinámica constructiva que ayuda a su crecimiento.
Es por ello que un ambiente de confianza es fundamental para construir una cultura de feedback sana.
Esa confianza sólo se da cuando los líderes de la empresa la inspiran. Tener managers a los que el equipo teme hablar abiertamente es una barrera que impide que el feedback se integre con tu cultura de empresa.
Te damos unos consejos y buenas prácticas, para que ayudes a los managers a crear un ambiente de confianza en la empresa:
- Hablar de emociones. Pídeles que reconozcan los sentimientos de frustración o decepción ante su equipo. Así mismo, ellos deben fomentar que las personas que trabajan con ellos también lo hagan. Es importante que siempre sean específicos acerca de la situación en concreto que causó frustración.
- Pedir feedback. Dile a tus managers que pidan feedback a sus miembros de equipo. Al mostrarles a todos que es seguro compartir sus verdaderos pensamientos y opiniones acerca del liderazgo en la empresa, se crea la confianza de hacerlo más a menudo.
- Fomenta reconocer el esfuerzo y no solo el buen desempeño. Es normal que en el equipo existan empleados con habilidades más desarrolladas que otros. Por ello debes reconocer el esfuerzo de alguien cuando sea necesario, así todos tienen la oportunidad de recibir feedback positivo.
Así ayudarás a que los managers de la empresa transmitan al equipo que dar feedback es seguro y constructivo para todos. Esto ayudará a alentarlos y a que se sientan más cómodos recibiendo y dando feedback.
Fomenta todos los tipos de feedback
Desafortunadamente algunas personas al escuchar la palabra feedback enseguida piensan en “crítica”.
Como hemos mencionado anteriormente, el feedback o reconocimiento positivo también debe ser un hábito en todas las empresas. Fomenta entre los empleados celebrar el éxito de todos en el equipo, sin importar que sus logros sean pequeños o grandes. Asegúrate que todos vean el feedback no solo como una oportunidad de mejora, sino también como una forma de reconocer el buen desempeño, esfuerzo y triunfos.
Cómo lograr que dar feedback sea parte permanente de tu cultura de empresa
Para lograr que el feedback se convierta en una práctica habitual en tu cultura de empresa evita integrar prácticas que no sean eficientes en el largo plazo.
La forma más fácil de lograr que el feedback sea parte del día a día de tu empresa es automatizar el proceso. Un claro ejemplo de cómo hacerlo son las estrategias usadas por Nailted para ayudarte a construir una cultura de feedback. A través de nuestra solución podrás crear:
- Bucles de reconocimiento entre empleados para compartir feedback positivo.
- Recoger feedback anónimo a través de encuestas de pulso, y así conocer las necesidades, preocupaciones e intereses de los empleados.
- Compartir feedback en reuniones 1:1, consiguiendo fomentar relaciones de confianza entre managers y empleados.
- Lanzar campañas de check-ins o evaluaciones del desempeño para compartir feedback constructivo a nivel 180 o 360 entre compañeros.
Al final verás todos los excelentes resultados que trae para tu empresa: empleados más satisfechos y comprometidos, mejora de procesos y desempeño laboral. Sobre todo verás que en tu empresa todos tendrán una voz que no temerán usar. ¡De eso se trata tener una cultura de feedback!